27 de junio de 2010

Ella







Ayer me preguntaste que te veía yo de especial y mi respuesta fue; "La familia viene impuesta y los amigos se encogen".
Tú te encogiste hombros y me sonreíste... Dándome a entender que menuda tontería de respuesta te había dado...
Sabes de sobra que no se me da bien demostrar cosas, y por ello siempre que lo hago lo valoras de sobra.
Me apetecía dedicarte esta entrada porque siempre fuiste una parte de mi, el lado que me complementa, mi parte tranquila, paciente, atenta... Ese lado que por mi misma no tengo, y que con tu presencia me proporcionas.
A ti te escogí como una de las personas más importante en mi vida, y a la cual puedo decir ciegamente que aunque la vida da muchas vueltas, sé de sobra que tú siempre vas a estar en ella. Porque siempre me lo has demostrado.
Lo que más adoro de estar contigo, es que puedo hablar sin decir nada y que siempre percibes mi alegría y mi tristeza, que comprendes mis cambios de humor, mi nerviosismo, mi temperamento, mi falta de paciencia... y nunca me lo recriminas.
Por todo ello, y por mil cosas más te quiero y siempre te querré.
Gracias por estar cada día a mi lado.

No hay comentarios:

Publicar un comentario